En el marco del Ejercicio Técnico “EXTEC Lizard“, realizado en el Campo de Pruebas Brigadeiro Veloso (CPBV), el Escuadrón Póker (1º/10º GAV) de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) alcanzó un importante hito operativo al superar las 30.000 horas de vuelo con sus aviones de ataque A-1 AMX. Este logro representa un nuevo capítulo en la historia de la aviación de combate brasileña y refleja la durabilidad y eficacia de una plataforma que, tras más de tres décadas en servicio, continúa siendo una pieza clave del poder aéreo brasileño.

Durante el ejercicio, que se desarrolló en una zona aislada de más de 20.000 km² en la Serra do Cachimbo, los pilotos del Escuadrón Póker realizaron maniobras de alta complejidad con empleo de armamento real —incluidas bombas guiadas Lizard 460, BAFG 460, BAFG 230 y cartuchos de cañón de 30 mm— en misiones de ataque y apoyo aéreo cercano. La actividad contó con el valioso apoyo logístico del Grupo Logístico de Santa Maria (GLOG-SM) y con la participación del escuadrón de rescate PARA-SAR, que operó como Guía Aéreo Avanzado (GAA) para mejorar la precisión en la ejecución de los ataques simulados.

El legado del AMX y su futuro

El hito de las 30.000 horas acumuladas por el Escuadrón Poker se suma a las más de 100.000 horas de vuelo totales registradas por la flota de A-1 en la FAB desde su incorporación. El A-1 AMX —desarrollado en los años 80 por el consorcio binacional AMX International, que integró a las empresas italianas Aeritalia y Aermacchi junto a la brasileña Embraer— no solo consolidó la capacidad de ataque de Brasil, sino que también representó un impulso estratégico para el posicionamiento de Embraer en la industria aeroespacial global.

“Este logro es fruto del trabajo incansable no solo de los pilotos, sino de todos quienes hacen posible que estas aeronaves sigan operando día a día”, destacó un portavoz del Escuadrón, agradeciendo especialmente a los equipos de mantenimiento del GLOG-SM y al personal de la Base Aérea de Santa Maria, cuya labor resulta vital para mantener la operatividad de estas aeronaves veteranas.

Rumbo a una nueva etapa

Mientras el A-1 AMX continúa cumpliendo misiones en la FAB, Brasil evalúa su reemplazo en el corto y mediano plazo. En la próxima cumbre del G20 que se celebrará en Río de Janeiro, se espera que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva se reúna con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, para discutir posibles acuerdos de cooperación en defensa. Entre ellos, se destaca el interés por el avión italiano M-346 de entrenamiento avanzado y ataque ligero, fabricado por la empresa Leonardo, como uno de los candidatos para renovar parte de la flota de combate brasileña.

El interés por el M-346 coincide con la decisión de la Fuerza Aérea Italiana de retirar del servicio activo sus AMX en abril de este año, tras 35 años de operaciones. Italia planea reemplazarlos por cazas Eurofighter Typhoon, marcando así el final de una era compartida entre ambos países, y dejando a la Fuerza Aérea Brasileña como el unico operador a nivel global de la aeronave de ataque.

Con este nuevo capítulo, Brasil se prepara para dar el siguiente paso en la modernización de su aviación de combate, sin olvidar el legado de una aeronave que ha sido símbolo de cooperación tecnológica entre naciones y eje operativo de su capacidad de ataque durante más de tres décadas.

*Fotografía de portada empleada a modo de ilustración.

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