Durante la jornada de ayer, bombarderos furtivos B-2 Spirit de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, bajo órdenes del presidente Donald Trump, ejecutaron un ataque contra las tres principales instalaciones nucleares iraníes, ubicadas en Fordow, Natanz y Esfahan. Conforme han transcurrido las horas desde los bombardeos, el Pentágono ha brindado mayores detalles generales de la Operación Midnight Hammer, la cual, además de los aviones de la USAF, involucró ataques provenientes desde el mar por parte de destructores y submarinos de propulsión nuclear de la Armada de EE.UU.

Bombarderos furtivos B-2
Sin lugar a dudas, fueron los principales protagonistas de la operación, penetrando el espacio aéreo iraní para atacar las instalaciones nucleares con fuerza devastadora. Según lo anunciado en una reciente conferencia de prensa, se confirmó que siete (7) B-2 Spirit lanzaron sobre los objetivos seleccionados por la inteligencia militar un total de catorce bombas GBU-57 Massive Ordnance Penetrator (MOP).
El empleo de este tipo de armamento no es menor, ya que se trata de una de las bombas no nucleares más potentes en servicio con la Fuerza Aérea de Estados Unidos, diseñada para destruir con fuerza abrumadora objetivos subterráneos como búnkeres fuertemente fortificados.

Desde el inicio de la Operación Rising Lion, la campaña de ataque de Israel a Irán, el gobierno israelí venía solicitando a los Estados Unidos la cesión de este tipo de armamento para acabar con el programa nuclear iraní. No obstante, actualmente la Fuerza Aérea Israelí carece de una plataforma capaz de emplear con seguridad y eficacia la GBU-57, cuya única plataforma operativa es el bombardero furtivo B-2.
Detalles adicionales de la Operación Midnight Hammer
Si bien el foco de la atención se ha centrado en los ataques realizados por los bombarderos, desde el Pentágono se ha destacado que esta operación requirió un coordinado e importante despliegue de medios y capacidades que incluyeron medidas de distracción, reabastecimiento, guerra electrónica y supresión de defensas aéreas enemigas, por citar solo algunas de las capacidades activadas por el instrumento militar estadounidense a través de sus comandos operacionales.
Previo a la operación, y como lo reportaron diversas fuentes OSINT, se registró el despliegue de bombarderos estratégicos en el Pacífico. Gracias a la reciente conferencia de prensa, se confirmó que esta maniobra formó parte de una estrategia de distracción para desviar la atención mundial e iraní hacia esa región, mientras que desde territorio continental de Estados Unidos se alistaba en la Base Aérea Whiteman el destacamento de B-2 que ejecutaría el ataque, cruzando el Atlántico en su ruta.
Este destacamento de siete B-2, conformado por tripulaciones de dos efectivos y con comunicaciones mínimas, inició su misión con una primera etapa de 18 horas de vuelo hasta arribar a la zona objetivo, realizando múltiples reabastecimientos en vuelo a lo largo de la ruta, presumiblemente con aviones KC-135 Stratotanker y KC-46A Pegasus.

Ya sobre territorio continental europeo, los bombarderos establecieron contacto con aviones de combate que sirvieron como escolta y apoyo, presumiéndose la participación de aeronaves de alerta temprana y control aerotransportado, inteligencia de señales y guerra electrónica.
La Armada de EE.UU. inicia sus ataques contra Irán
Previo al arribo de los B-2 a la zona de operaciones dentro del espacio aéreo iraní, y aproximadamente a las 05:00 PM, hora del Este de Estados Unidos, submarinos de propulsión nuclear operando bajo el área de operaciones del Comando Central de EE.UU. lanzaron más de dos docenas de misiles de crucero de ataque terrestre TLAM Tomahawk contra objetivos clave en Esfahan.

Escolta de los B-2
Simultáneamente con el ataque de la Armada de EE.UU., cazas de cuarta y quinta generación adelantados a la formación de bombarderos furtivos desplegaron señuelos y otras capacidades no especificadas. A su vez, se confirmó que se realizaron misiones de supresión de defensas aéreas iraníes que pudieran representar una amenaza para la formación de bombarderos.
El ataque de los B-2
Aproximadamente a las 06:40 PM, hora del Este de Estados Unidos, durante la madrugada en Irán, el bombardero líder de la formación de B-2 realizó el primer ataque contra las instalaciones nucleares de Fordow mediante el lanzamiento de dos bombas GBU-57 MOP, mientras que el resto de los aviones atacaron otros objetivos, totalizando el lanzamiento de catorce bombas de este tipo.
Todas las instalaciones nucleares iraníes —Fordow, Natanz y Esfahan— fueron atacadas entre las 06:40 y las 07:05 PM hora del Este de EE.UU., aproximadamente a las 02:00 AM hora iraní, momento en el cual los misiles Tomahawk realizaron un ataque adicional en Esfahan.
Finalizado el ataque, la formación de bombarderos B-2 salió indemne del espacio aéreo iraní. El Pentágono expresó que no hubo respuesta por parte de cazas de la Fuerza Aérea de Irán, ni detección o reacción por parte de sus sistemas de defensa aérea. Este último punto no es menor, ya que, tras más de una semana de ataques por parte de la aviación israelí, las capacidades de defensa aérea y vigilancia iraníes se encuentran severamente degradadas.
*Fotografía de portada empleada con fines ilustrativos.
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