En el marco del programa de adquisiciones para fortalecer su flota de helicópteros, Polonia ha dado a conocer que decidió posponer sus planes de compra de 32 nuevos S-70i Black Hawk para equipar a sus Fuerzas Armadas, cuya fabricación se acordó en 2023 con PZL Mielec (filial de la compañía estadounidense Lockheed Martin). Acorde ha sido informado por fuentes oficiales de la cartera de defensa, la decisión responde a la necesidad de volver a evaluar la verdadera utilidad de las plataformas adquiridas en los entornos de combate actuales, especialmente de cara a un potencial enfrentamiento con Rusia de cara al futuro.
Recogiendo algunas de las declaraciones emitidas por Paweł Bejda, actual Secretario de Estado del Ministerio de Defensa Nacional, durante una reciente conferencia de prensa: “Contrariamente a lo que escriben algunos medios y a lo que afirman algunos políticos de la oposición actual, no hemos rescindido ningún contrato relacionado con los helicópteros S-70i (…) La situación geopolítica, la situación en el este —la guerra en Ucrania, lo que Rusia está comprando actualmente, equipando a su ejército— y todo lo que nuestras fuerzas aéreas realizan en misiones relacionadas con el sistema de la OTAN, está siendo analizado por el Estado Mayor del Ejército Polaco, nuestros pilotos, especialistas y expertos.“
En ese sentido el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas polacas, el general Wieslaw Kukula, detalló que su país buscará enfocarse en la incorporación de nuevos helicópteros de entrenamiento, además de helicópteros navales capaces de desempeñarse en misiones SAR y helicópteros de transporte pesado. Al igual que el secretario Bejda, el general Kukula manifestó que ello se debe a un cambio de prioridades de las fuerzas polacas, ello en función de las lecciones aprendidas en la guerra de Ucrania.
La decisión tomada por el gobierno polaco en este sentido no estuvo libre de críticas, considerando que se trata de un programa iniciado durante una administración previa que actualmente forma parte de la oposición política; hablamos particularmente del partido Ley y Justicia (PiS). Uno de sus principales representantes, el ex ministro de defensa y actual diputado Mariusz Blaszczak, describió el cambio de rumbo como una “vergüenza” y alertó sobre los riesgos que implica retrasar el proceso de incorporación de estas plataformas. Lockheed Martin por su parte manifestó que espera poder mantener viva su asociación con Polonia, la cuál alcanza también a los cazas F-16, además de 1.700 empleos a través de la mencionada PZL Mielec.
Finalmente, cabe destacar que otros de los programas de adquisición de armamento para las Fuerzas Armadas de Polonia no sufrirían los mismos problemas que enfrenta la compra de los helicópteros en cuestión, tal es así que la comunicación del secretario Bejda detalla: “Próximamente, aviones F-35 y helicópteros AH-64 aterrizarán en suelo polaco, el buque Miecznik entrará en servicio y también se tiene en cuenta el progreso que hemos logrado hasta la fecha en la adquisición de una flota de helicópteros moderna, que ya operamos en las Fuerzas Armadas.”
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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