Siguiendo lo expresado por representantes de Shenyang Aircraft Corporation (SAC), la inteligencia artificial (IA) ha comenzado a integrarse en el desarrollo de los nuevos cazas para a Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China (PLAAF). Según informó Wang Yongqing, diseñador jefe del Instituto de Diseño Aeronáutico de Shenyang, la plataforma y startup china DeepSeek está siendo utilizada para apoyar tareas en investigación y el desarrollo de las aeronaves.
La aplicación de la inteligencia artificial al ámbito de la defensa ya no resulta una novedad. A lo largo de los años, estas herramientas han demostrado un potencial significativo en distintos campos, aportando nuevas ideas y enfoques tanto para la investigación como para el diseño de sistemas aeroespaciales avanzados. Para la Shenyang Aircraft Corporation (SAC), una de las empresas líder de China y fabricante de los cazas J-15 y J-16, como del futuro J-35 actualmente en desarrollo, DeepSeek ha sido una de las incorporaciones más novedosas que ha permitido optimizar la carga de trabajo de los equipos de ingeniería. Según Wang, la plataforma asiste en tareas rutinarias como la revisión documental, lo cual libera recursos humanos para concentrarse en áreas críticas del desarrollo.
DeepSeek hoy se posiciona como una solución alternativa, rentable y competidora con las empresas de tecnología estadounidense. Estas herramientas que provee están siendo utilizadas en múltiples sectores que van desde la sanidad como en la defensa. Siguiendo esa línea, especialistas afirman que la IA podría mejorar el rendimiento en combate de aeronave, aumentar la eficacia de la utilización de tácticas de empleo de enjambre de drones, aumentar el realismo y la eficacia del entrenamiento de pilotos y apoyar la toma de decisiones en el campo de batalla.
En otro plano, la empresa también confirmó que los trabajos en el nuevo caza de quinta generación J-35, y sus variantes, avanzan de “de forma constante según nuestros planes”. Al respecto, el avión furtivo posee en desarrollo una variante naval destinada a integrar y conformar los nuevos Grupos Aéreos Embarcados de los actuales, como futuros, portaaviones de la Armada de China. Por citar algunas características de esta versión, se puede destacar su compatibilidad con los nuevos sistemas de catapultas electromagnéticas y de recuperación de aeronaves que equipan al Tipo 003 Fujian, actualmente en fase de pruebas y evaluaciones de navegación.
A la fecha, en cuanto a la versión embarcada, se han registrado diversas fotografías que dan cuenta de que se encuentra en plena fase de pruebas de vuelo, mientras que la versión destinada a la Fuerza Aérea de China está más avanzada en su desarrollo, siendo develada y presentada oficialmente durante el pasado Zhuhai Air Show, donde fue exhibida y realizó diversas demostraciones de vuelo al público chino e internacional.
En paralelo, Shenyang también continúa con el desarrollo de prototipos que podrían corresponder a nuevos aviones furtivos de sexta generación. Denominado extraoficialmente como “J-50” o “J-XDS”, se trata de una aeronave menor tamaño en comparación con el J-36 de Chengdu, y con un diseño de ala en forma de lambda y equipado con dos motores, siguiendo la tendencia de los cazas de quinta generación chinos, como el J-20 y J-35.
La realización de un mayor número de vuelos de prueba, o el incremento en su registro por parte del público, viene permitiendo apreciar cada vez mayores detalles, entre los cuales destaca la mencionada ala en forma de lambda, la cual tendría beneficios, tales como una mayor furtividad, pero teniendo como punto negativo un mayor grado de complejidad en su fabricación y costo de producción más elevados.
*Fotografías empleadas a modo de ilustración.
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