Con una formación a baja altitud sobrevolando las Pirámides de Egipto, la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China (PLAAF) dio por finalizado su primer ejercicio combinado con la Fuerza Aérea Egipcia, denominado “Aguilas de la Civilización 2025”. El despliegue llevado a cabo durante 18 días, representó un nuevo hito en la cooperación militar entre ambos países, además de conformar lo que fue la primera vez que China despliega personal, aeronaves de combate, transporte y control aerotransportado en el Norte de África para un ejercicio aéreo combinado.

El ejercicio formó parte de un despliegue de largo alcance que inició a mediados de abril cuando chinos J-10C/S despegaron desde sus bases en China con destino al norte de África para ejercitarse junto a aviones MiG-29M/M2 egipcios. La presencia de medios aéreos chinos puso de manifiesto la consolidación de una estrategia que busca una mayor cooperación con nuevos socios en diversos continentes, la cual no solo se limitó a la realización de los ejercicios bilaterales, sino que también a demostrar la capacidad logística y operativa de la PLAAF para desplegar y sostener un despliegue en otro continente bien alejado de sus bases en territorio nacional.

Esto último quedó plasmado con la demostración de una serie de capacidades estrátegica de la Fuerza Aérea de China Egipto, tales como la variante de rebastecimiento en vuelo del avión de transporte Y-20, designada YU-20 y aviones de alerta temprana y control aerotransportado KJ-500. Bajo ese marco, uno de los hitos más relevantes fue la operación de reabastecimiento aéreo de un YU-20 chino a una caza MiG-20 egipcio; complementados con ejercicios de donde se realizaron misiones de cobertura aérea, defensa aérea y búsqueda y rescate.

Por último, y como síntesis del ejercicios realizados a lo largo de las últimas semanas, fue registrado el sobrevuelo sobre las Pirámides de Egipto de una formación conformado por las aeronave que participaron de la actividad, reflejando los estrechos y crecientes lazos entre ambas naciones. Expertos militares chinos, señalaron que el perfil de entrenamiento observado, orientado al dominio del espacio aéreo y la neutralización de las amenazas, reflejó un enfoque modernos de combate donde no solo se requiere de cazas, sino de toda una serie de capacidades de apoyo, que van desde el transporte, el rebastecimiento y el control y vigilancia del espacio aéreo de un área de operaciones.

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