El pasado 15 de enero, un escuadrón de bombarderos B-B1 Lancer de la Fuerza Aérea de EE. UU. (USAF) aterrizaron en la Base Aérea Andersen, en la isla de Guam, constituyendo el primer despliegue del año en el Pacífico de la Fuerza de Tarea de Bombarderos. Asimismo, durante este trayecto, dos aeronaves participaron de un ejercicio trilateral con la Fuerza Aérea de Corea del Sur y la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón con el objetivo de fortalecer la cooperación militar entre Estados Unidos y sus aliados asiáticos.
Conforme a la información divulgada, un total de cuatro bombarderos B-1B Lancer asignados al 34º Escuadrón de Bombarderos de la Base Aérea Ellsworth, Dakota del Sur, arribaron a la isla del Pacífico occidental. Como parte de los despliegues rotatorios y usuales de la fuerza, el último despliegue se dio en mayo del 2024, donde USAF destinó un número no confirmado de bombarderos en el marco de la asunción del presidente de Taiwán Lai Ching-Te, y tras registrarse un ejercicio militar del Ejército Popular de Liberación de China en los alrededores de la isla.
En cuanto al vuelo realizado entre las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos, Corea del Sur y Japón, desde el comunicado de las Fuerzas Aérea del Pacífico (PACAF) se afirmó que: “Este primer vuelo trilateral de 2025 se basa en una historia de sólida cooperación trilateral, lo que permite una respuesta coordinada inmediata a los desafíos de seguridad regional”. Estados Unidos ya había realizado vuelos bilaterales de cazabombarderos con Japón o Corea del Sur, pero el vuelo trilateral reflejó el fortalecimiento de los vínculos entre los tres países en respuesta a las tensiones con China y Corea del Norte.
Como fue mencionado en el comunicado, la Fuerza de Tarea de Bombarderos permite que diferentes tipos de estas aeronaves operen en la región del Indo-Pacífico, desde ubicaciones de ultramar hasta en el territorio de Estados Unidos. Hoy Guam es una de las ubicaciones más estratégicas del país norteamericano en el Pacífico, definida por su cercanía a los territorio de Japón, Corea del Sur, Filipinas, entre otros, pero sobre todo como nodo de disuasión para China. Si bien el envío de bombarderos es argumentado como algo rutinario, muchas veces responden a eventos de la región que ponen en juego el rol y los intereses estratégicos que tiene Estados Unidos en el Indo-Pacífico, lo que deja mensajes claros de determinación y capacidad.
*Créditos de las imágenes: U.S. Air Force
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