En lo que significa su primer despliegue a Sudamérica y la Antártida, el patrullero ártico HMCS Margaret Brooke de la Armada de Canadá partió recientemente desde Halifax, para llevar a cabo la Operación Proyección 2025. Este despliegue marca la primera vez que un buque de la Armada Canadiense circunnavega América del Sur y visita la región antártica.
Durante su misión, el buque visitará diversos puertos en Sudamérica y colaborará en iniciativas científicas, destacando la cooperación internacional como un elemento central de su operación. Una de las principales tareas del Margaret Brooke será apoyar la investigación antártica. Un equipo de científicos de distintas agencias del Gobierno de Canadá se encuentra a bordo, y el buque brindará las capacidades logísticas necesarias para la realización de estudios en el entorno único de la región.

Esta colaboración refuerza los esfuerzos canadienses en materia de investigación polar, al tiempo que permite aprovechar las características avanzadas de este patrullero en condiciones extremas. El despliegue también incluye actividades diplomáticas, como visitas a puertos de Sudamérica.
Entre ellas, el patrullero Margaret Brooke realizó una escala en la ciudad chilena de Punta Arenas, donde embarco personal científico, teniendo previsto una vez concluida su operación en aguas antárticas una visita a la ciudad de Rio de Janeiro (Brasil) entre los días 30 de enero y el 6 de febrero del corriente.
Estas escalas tienen el objetivo de fortalecer relaciones bilaterales y fomentar la cooperación con países de la región, además de proyectar la imagen de Canadá como un socio confiable y comprometido con la paz y la seguridad en el hemisferio sur. La presencia del buque en estas aguas subraya el interés canadiense en ampliar su participación en temas relacionados con el Atlántico Sur y la Antártida.

La clase Harry DeWolf, a la que pertenece el Margaret Brooke, fue concebida como parte de la Estrategia Nacional de Construcción Naval de Canadá. Diseñada para operar en entornos polares, cuenta con un desplazamiento de más de 6.000 toneladas, 103,6 metros de eslora y 19 metros de manga, además de certificación Polar 5, que le permite navegar en aguas heladas. Su armamento incluye un cañón BAE Mk 38 de 25 mm y ametralladoras de calibre 12,7 mm, mientras que su capacidad aérea le permite operar helicópteros medianos, como el CH-148 Cyclone, lo que expande considerablemente su alcance operativo.
El buque destaca no solo por sus capacidades técnicas, sino también por su diseño multifuncional. Equipado para enfrentar climas extremos, puede desempeñar tareas de patrullaje, asistencia logística y apoyo a investigaciones científicas, tanto en el Ártico como en la Antártida. Esta versatilidad lo convierte en un elemento clave para las misiones de la Armada Real Canadiense en regiones remotas como lo es la Antártida.
*Imágenes empleadas en carácter ilustrativo. Créditos: Real Armada Canadiense.-
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