Según ha revelado el partido gobernante de Corea del Sur, su vecino Corea del Norte, a través de ciberataques, habría robado información técnica sobre el tanque K2 Black Panther y de aviones SIGINT/ELINT de las Fuerzas Armadas Surcoreanas. La filtración de datos y tecnología podría poner en peligro las capacidades de vigilancia y el reconocimiento de la Fuerza Aérea, como de las unidades blindadas del ejército, hechos que fueron confirmados en un comunicado oficial.
En este contexto, el Partido del Poder Popular (PPP) afirmó que “fuerzas presuntamente norcoreanas” habían robado datos relacionados con los aviones de reconocimiento e inteligencia de señales Baekdu y Geumgang, activos clave para vigilar la frontera con su vecino del norte y sus actividades, junto información técnica sobre del K2 Black Panther, principal y más modernos tanque MBT del país.
El K2 Black Panther es un tanque surcoreano de última generación, diseñado por la Agencia para el Desarrollo de la Defensa y fabricado por Hyundai Rotem. Es el principal tanque de combate del país, estimando que cuenta con unas 260 unidades en servicio mientras otras 150 están en proyecto. Fue desarrollado como un reemplazo moderno de los vehículos de combate más antiguos del ejercito, complementando a los K1, combinando un cañón principal de 120 mm de carga automática, un blindaje compuesto avanzado y junto con sistemas de protección activa (APS).
Entre los datos claves para Corea del Sur que fueron robados también se encuentran los de los aviones de reconocimiento Baekdu y SIGINT/ELINT Geumgang, variante militar del Hawker 800XP. Cabe recordar que los mismos se encuentran operativos desde 2002 desempeñando un papel fundamental al recoger señales de inteligencia DE Corea del Norte. El robo de información ocurre en un momento crítico para la Nación, considerando que Corea del Sur se encuentra modernizando su flota de Baekdu en un proyecto liderado por Korea Aerospace Industries (KAI) de aproximadamente 640 millones de dólares, en pos de convertir convertir cuatro jets Dassault Falcon 2000LXS adicionales en avanzados aviones de reconocimiento de la clase mencionada.
Filtración de datos que pone a prueba la ciberseguridad surcoreana
La información filtrada -y robada, según el PPP- en manos de Corea del Norte es fundamental para las comunicaciones, la vigilancia, el reconocimiento y la detección del terreno de Corea del Sur. Principalmente, porque se trata de capacidades militares que poseen información crítica sobre el país y ponen a prueba la seguridad e integridad nacional. Que caiga en manos del vecino del Norte es, sin dudas, un problema mayor para la nación.
Pese a las mejoras de rendimiento de esta clase de sistemas de vigilancia, el PPP consideró que existe una creciente amenaza de ciberataques norcoreanos que implica el robo de tecnología crítica de la industria de defensa nacional. Así, el partido solicitó la promulgación de una Ley Básica de Ciberseguridad y la modificación de la Ley Penal para ampliar las leyes de espionaje a las “entidades extranjeras“.
Pero cabe destacar que el reciente robo de datos del K2 Black Panther y del binomio Baekdu-Geumgang no es el primero, sino que es uno de los recientes casos de filtración de información de gran repercusión en el país. Por ejemplo, ciberagentes norcoreanos se infiltraron en las redes de al menos 10 fabricantes surcoreanos de material de defensa el pasado mes de abril, mientras que un empleado civil del Mando de Inteligencia de Defensa filtró una lista clasificada de agentes de inteligencia militar surcoreanos a Corea del Norte en otro incidente del estilo.
Los hechos repetitivos en torno a la ciberseguridad surcoreana han suscitado dudas sobre la ciberseguridad del país y el manejo de la información sensible en torno a su defensa, motivo por el cual el PPP y el principal partido de la oposición, el Partido Democrático, presentaron proyectos de ley para mejorar la estructura de ciberseguridad en la anterior Asamblea Nacional. No obstante, ninguno de ellos avanzó, ya que diferían en cuanto a qué organismo supervisaría estos esfuerzos. “Para proteger nuestros intereses nacionales, debemos emprender rápidamente una revisión de la legislación penal“, planteó el PPP en el comunicado reciente.
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