Gracias a una reciente publicación de Rostec, se ha dado cuenta de la entrega de un nuevo lote de vehículos de combate de infantería BMP-3 a las Fuerzas Terrestres rusas. Las unidades fueron entregadas por la planta de fabricación de vehículos Kurganmashzavod (perteneciente a la empresa High Precision Systems) al Ministerio de Defensa de la Federación rusa para su suministro a unidades.

En base a lo expresado en su comunicado del 14 de abril, Rostec indicó que los vehículos BMP-3 cumplieron todos los requisitos y pruebas de aceptación establecidas por el Ministerio de Defensa. Formando estos lotes parte de la orden de fabricación emitida durante el primer trimestre del año para la provisión de nuevas unidades a las Fueras Terrestres.

No obstante, ni desde Rostec, ni el Ministerio de Defensa, han expresado la cantidad de vehículos de combate de infantería provistos en este último lote entregado. Indicando únicamente algunos de los equipos instalados en los BMP-3, los cuales pueden denotar a que versión pertenecerían. Al respecto, desde el consorcio ruso indicaron que “El equipo entregado está equipado con la mira principal del artillero-operador “Sodema” y kits de protección adicionales: pantallas y rejillas blindadas”.

De esta manera, gracias a la presencia del nuevo sistema de visión Sodema (provisto de telemetro láser), puede suponerse que los vehículos corresponden a la versión BMP-3M, la cual incluiría otras mejoras. Siendo el caso de nuevo kit de blindaje reactivo, junto al más moderno motor UTD-32 de 660 HP de potencia.

Si bien en el comunicado original no se ha realizado mención a la guerra en Ucrania, es altamente probable que los nuevos BMP-3 sirvan a fin de suplir las perdidas en las operaciones militares sufridas durante los últimos meses. Si bien las cifras varían entre las fuentes que se consulten, al inicio de la invasión del pasado 24 de febrero de 2022, las Fuerzas Armadas Rusas desplegaron un total de 3.800 vehículos de transporte y combate de infantería; sumando todas las versiones de BMP-1, BMP-2 y BMP-3.

A lo largo del transcurso del último año de combates, las fuentes consultadas estiman que habrían sido capturados o destruidos un total de 300 BMP-1, 750 BMP-2 y 220 BMP-3. Tal y como atestigua un artículo publicado por la revista Forbes con motivo de la víspera del primer aniversario del inicio de la invasión. Las cifras, sujetas a cambios y rectificaciones, surgen de fuentes de información abiertas que han revelado las perdidas materiales de las Fuerzas Armadas Rusas. Debiendo ser tomadas con cautela.

No obstante, la Federación Rusa cuentan con importantes reservas de material con las cuales reponer sus pérdidas. En especial de los vehículos fabricados en los tiempos de las Unión Soviética, como es el caso de los BMP-1 y BMP-2, las cuales se encuentra entre las 7.200 y 1.400 unidades, respectivamente.

Sin embargo, este no es el caso de los BMP-3, los cuales se encontrarían en menores cantidades, al ser el vehículo diseñado y producido en las etapas finales de la Unión Soviética. Requiriendo la producción de nuevas unidades, a la espera de la introducción de un sucesor basado en la plataforma Armata. Del cual, al presente, no se tiene novedades, recibiendo la denominación de Kurganets-25.

Con esta realidad, desde Rostec han destacado que, en el complejo de empresas, entre las que se encuentra la mencionada Kurganmashzavod, se han establecido y agregado nuevos turnos para suplir las ordenes elevadas por el Ministerio de Defensa ruso.

*Fotografías empleadas a modo de ilustración.

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