Tal y como venimos reportando desde Zona Militar, los Estados miembros de OTAN se encuentran colaborando con el envío armamento a Ucrania para garantizar la defensa del país en su conflicto con Rusia. Por su parte, el gobierno del Reino Unido ha enviado alrededor de 7.000 misiles antitanque de diverso tipo, pero dicho inventario aún no ha sido reemplazado en las reservas del Ejército Británico.

Como resultado, la preocupación oficial por insuficiencias en cuanto a la cantidad de misiles antitanque disponible crece cada vez más en el Reino Unido. Sin embargo, el Ministro de las Fuerzas Armadas, James Heappey, declaró esta semana que “las reservas de armas letales de la OTAN han sido insuficientes” en referencia a lo enviado a Ucrania. Casualmente, las declaraciones del Ministro se producen en medio de las discusiones por el temor de que el Ejército Británico se quede sin reservas de misiles antitanque ligeros de próxima generación (NLAW); dado que se dio a conocer que aún se no ha dado luz verde para la producción de los misiles que reemplacen en las reservas a los enviados a Ucrania.

Sistema NLAW durante la guerra de Ucrania.

Si bien los sistemas NLAW (Next Generation Light Anti-tank Weapon) han demostrado ser altamente eficaces en el frente de batalla ucraniano; el total de sistemas enviados por parte del Reino Unido equivale a aproximadamente la mitad de las reserva total del Ejército Británico. Las preocupaciones crecen a medida que el malestar gubernamental se hace entrever; ya que la industria del defensa del Reino Unido, como de otros países de la OTAN, no poseen la capacidad para reponer de forma rápida los sotcks de sistema de armas que han sido enviados a Ucrania durante los últimos meses.

“La capacidad industrial simplemente no existe para reemplazar esas cosas al ritmo que sería necesario”, recalcó James Heappey. Sin embargo, se insiste en que el Reino Unido aún tiene suficientes reservas para su seguridad nacional. Lo cierto es que si bien los tiempos de envío de los sistemas de armas a Ucrania son bastante rápidos, los tiempos de producción para los reemplazos no funcionan de la misma manera.

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4 COMENTARIOS

  1. Increíble que una potencia económica y militar como el Reino Unido se quede sin este valioso material en tan poco tiempo y sin estar involucrado directamente en la guerra. Los contribuyentes ingleses deberían de hacer más de una pregunta.

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