El 22 de Septiembre, Elbit Systems UK comunicó que fue seleccionada por Rheinmetall BAE Systems Land (RBSL) para suministrar el Sistema de Alerta Láser (ELAWS) como parte del Programa Challenger 3 (CR3) del Reino Unido. Recordemos que dicho programa es parte del acuerdo firmado por el Ejército Británico, quien recibirá a lo largo de la década un total de 148 nuevos tanques Challenger 3.
De acuerdo a lo anunciado, Elbit Systems UK suministrará 150 ELAWS que proporcionarán al personal militar de Reino Unido alertas para respaldar a las respuestas dadas ante las amenazas guiadas por láser. El ELAWS es un sistema ampliamente operativo y probado, que actualmente se encuentran en otros programas de vehículos blindados del Reino Unido y otros clientes internacionales. El ELAWS, que ofrece una cobertura de 360°, es capaz de detectar, clasificar y localizar con precisión fuentes láser como telémetros, misiles guiados antitanque, designadores de objetivos e iluminadores infrarrojos.
“Tenemos un historial comprobado de apoyo a capacidades avanzadas para nuestras Fuerzas Armadas y experiencia en el suministro de sistemas de protección de alta tecnología para vehículos blindados. Estamos comprometidos a garantizar que el personal de las Fuerzas Armadas del Reino Unido esté adecuadamente equipado y protegido contra una variedad de amenazas en constante evolución, y continuaremos apoyando todas las fases de este programa desde varios de nuestros sitios en todo el Reino Unido”, explica Martin Fausset, Director General de Elbit Systems UK.
Sobre el Challenger 3
Es un MBT (Main Battle Tank), última versión de la familia de tanques Challenger británica. Inicialmente el programa apuntaba a mantener las capacidades operativas, siendo su objetivo cambiado a mediados de los 2015. A partir de entonces, los esfuerzos se han direccionada en extender la vida útil por medio del reemplazado de componentes desfasados con que mantener vigente al Challenger por la actual década, con mira hasta 2035 inclusive.
La designación Challenger 3 surgió como nueva denominación presentada en la más reciente revisión de la Política de Defensa del Reino Unido. La nueva designación surgió días posteriores a las declaraciones del CEO of Rheinmetall, Armin Papperger, donde confirmara que la compañía alemana fue la seleccionada para realizar la modernización del Challenger.
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