En la sociedad argentina existe una baja demanda por la Defensa como bien público a pesar del dinamismo del escenario internacional y sus latentes situaciones de tensión y conflictos.
Pero el año pasado se introdujo una nueva problemática como desafío para la defensa en la Argentina y en el mundo. La crisis sanitaria que desató el virus SARS- Cov-2 o Covid-19, acarreo efectos negativos, no solo en materia de salud, sino que también afectó varios aspectos de la vida social y golpeó gravemente la economía a nivel nacional e internacional por causa de las medidas que fueron tomadas en calidad de urgencia ante la incertidumbre que planteaba el desconocimiento de una nueva enfermedad.
También, para muchos analistas internacionales, el 2020 definió un punto critico en las relaciones bilaterales entre una clásica potencia mundial como lo es Estados Unidos, y la República Popular China que crece a pasos agigantados, disputando poder en varias zonas donde existen choques de intereses.
En el contexto global complejo que se presenta, la actual gestión de la cartera de defensa afirma que es necesario establecer una política de defensa y requipar el instrumento militar con personal comprometido con la democracia, las instituciones y la Constitución Nacional. Para ello considera que hay que trabajar en la defensa de la soberanía en sus tres dominios, aire, tierra y agua, y en la generación de acuerdos de cooperación y el buen fomento de las relaciones bilaterales con países de interés para la Argentina en materia de defensa.
Para especificar y dar un encuadre organizado a la labor realizada y las expectativas a futuro, la Secretaría de Asuntos Internacionales para la Defensa del Ministerio de Defensa presentó un documento titulado “informe anual de gestión del año 2020” 2020 donde se analiza la situación en Argentina, su inserción regional en materia de defensa, y en el sistema internacional.
El documento establece que dada la crisis sanitaria se puso a disposición todas las capacidades de las Fuerzas Armadas con el propósito de evitar la propagación del virus y cumplir con las misiones secundarias de asistencia humanitaria y apoyo a la comunidad. La puesta a disposición de las capacidades del instrumento militar fue dada en el contexto del Operativo General Manuel Belgrano, que en la actualidad se encuentra en su segunda etapa de operaciones, y que se coordinó con otras agencias del Estado para ejecutar varias acciones destinadas a ayudar en la mitigación del virus, y en la repatriación de ciudadanos varados en el extranjero.
Por otro lado, se afirma que la situación de crisis fomento a nivel MERCOSUR, la coordinación de un grupo de consulta e intercambio de experiencias e información avocado a la lucha contra el covid-19, que sigue vigente hasta la fecha y que ha sido una gran fuente de consulta y lecciones aprendidas para enfrentar la pandemia en colaboración con otros países de la región.
A su vez, las Fuerzas Armadas no detuvieron su participación en las Misiones de Paz de las Naciones Unidas a pesar de la pandemia, sino que, por el contrario, continuó con su participación e incluso aumentó su presencia. También dice que en la agenda 2020 se destinaron esfuerzos para reconfigurar las agregadurías militares argentinas en el mundo en función de los intereses de la Defensa y de la política exterior del país.
Asimismo, se establece que puso en marcha un plan de reactivación de la industria nacional impulsado por el FONDEF, entendiendo el rol fundamental y el peso que el sistema internacional tiene para llevar a cabo dicho cometido, en la búsqueda de oportunidades que ofrezcan sustitución de importaciones, inversiones con convenios de cooperación, transferencia de tecnología, etc.
Todo esto de detalla con el objetivo de esclarecer y divulgar cual fue la labor que las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Defensa establecieron en el contexto de crisis mundial y cuál es su proyección a futuro.
Lo que se logró hacer, sin duda quedó a la vista de todos, pero lo interesante es descubrir cuales son los planes que el ministerio tiene para el futuro de la defensa en consonancia con los lineamientos generales de la política exterior argentina, siendo estos los siguientes:
-Fortalecer mediante los mecanismos bilaterales y multilaterales la cooperación de la política internacional de la defensa.
-Profundizar y diversificar las relaciones internacionales de la defensa y de la diplomacia militar.
-Promover una mayor presencia y participación en operaciones multilaterales de paz y ejercicios combinados.
-Contribuir a la promoción de inversiones y a la inserción internacional de la producción, la ciencia, la tecnología e innovación de la defensa.
-Impulsar los vínculos regionales e internacionales de la defensa para la promoción de la paz y la cooperación en el Atlántico Sur y en el continente Antártico.
Sobre el primer punto establece el interés de fomentar las relaciones bilaterales con Brasil en materia de defensa y de cooperación entre las Fuerzas Armadas de ambos países y destaca la visita de la delegación argentina a la plata de IVECO. Asimismo afirma que dado el contexto de pandemia, los Grupos de Tareas que se conformaron, ayudan al establecimiento de mejoras en las relaciones con Uruguay, Chile, Paraguay, Estados Unidos, Francia, España, Portugal y Rusia.
Sobre la diversificación de las relaciones internacionales de la defensa y la diplomacia militar se planificó una Selección de los Agregados de Defensa y de las Fuerzas Armadas para el período 2021-2022 con 27 puestos vacantes para Alemania, Bolivia, Brasil, Chile, China, Colombia, España, Egipto, Rusia, Sudáfrica, entre otros destinos.
También se presentó el Programa Estratégico Sino-Argentino (PESA), una iniciativa conjunta de la Universidad de la Defensa Nacional (UNDEF) y del Ministerio de Defensa que tiene por finalidad el armado de la carrera de grado de Estudios Estratégicos Chinos para promover las relaciones con China.
En lo que se refiere a Misiones de Paz, la Argentina tiene una historia de compromiso con las misiones de mantenimiento de paz desde 1958 y desde entonces ha enviado personal sin interrupciones. Actualmente Argentina se encuentra operando en UNFICYP, UNTSO, MINURSO, MINUSCA, UNMOGIP, UNVMC, UNIFIL.
Sobre la promoción de inversiones y a la inserción internacional de la producción, la ciencia, la tecnología e innovación de la defensa, el FONDEF se ubica en el centro como principal herramienta de impulso para lograr dicho objetivo. Desde Zona Militar se estuvieron dando a conocer varias propuestas de cooperación para al defensa como también propuestas de adquisición donde aún se desconoce como continuarán las negociaciones o si existe algún interés por intentar continuar por esa vía.
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Hasta ahora en materia de defensa hay muchas palabras, nuestro gobierno pretende “relaciones carnales” con China y Rusia en ése tema pero hay pocos resultados aún, casualmente hace unas décadas atrás tuvimos otro gobierno, de la misma rama política, que tuvo ese mismo tipo de relaciones pero con EEUU. Hay algún tipo de factor común en éso de las relaciones estrechas o carnales y la venta de armamento? Yo creo que sí y la palabra mágica es OBEDIENCIA, nadie ofrece armamento simplemente por una cuestión comercial si no, más bien, por una cuestión política; estamos en una posición muy comprometida hoy día y conseguir lo que necesitamos puede costar más de lo pensado. Las potencias fabricantes y monopolios de armas son como los pederastas, te ofrecen un caramelo jugando a ser viejos simpáticos y luego viene el abuso deshonesto jugando al “doctor”.
La política de defensa nacional tiene que empezar por seleccionar lo que más nos conviene, sin acuerdos que comprometan nuestra autonomía, ni nos obliguen a aceptar ideologías ajenas a nuestra convicción como país soberano. No hay que olvidarse que, a pesar de todo, todavía tenemos capacidad para la fabricación de armamentos en forma local y con alianzas regionales. Jamás caigamos en el facilismo de creer que otra nación puede resolver nuestros problemas, porque entonces, perderemos la libertad.
mucho chamuyo y no hay nada de armamento letal para cuidar la soberania