ejército argentino

La información surge de un mensaje militar filtrado en los últimos días al que accedió Zona Militar.

El documento reservado surgido desde el Estado Mayor del Ejército Argentino ha dispuesto ciertas modificaciones estructurales en cuanto al despliegue de la fuerza en el territorio nacional, buscando movilizar los comandos de distintas divisiones y reposicionarlos en otras provincias.

En un primer lugar, restituye la idea de las grandes unidades de batalla (divisiones), idea que se busco modificar durante la gestión anterior con el objetivo de achicar la estructura burocrática de la fuerza. Esta idea, fue puesta en valor nuevamente apenas asumida la gestión actual bajo el paradigma de ocupación territorial que tiene históricamente la fuerza en el territorio nacional.

La misiva interna continua mencionando que dispondrá la reubicación del Comando de la Fuerza de Despliegue Rápido (FDR), actualmente posicionada en la provincia de Córdoba, y la llevará hacia Campo de Mayo. Esta información fue originalmente mencionada por este medio en la primera entrevista brindada por el actual Ministro de Defensa.

Por otro lado, constituye un Comando Conjunto Subordinado Norte en Curuzú Cuatiá, donde durante un tiempo funcionará el Comando de la División del Ejercito 1. Este comando pasará posteriormente a la Provincia de Santa Fe cuando la fuerza organice las instalaciones para albergar tanto al personal como al material necesario.

A partir del 15 de diciembre de este año se reactivará el Comando de la División de Ejército 3 en la ciudad de Bahía Blanca, la cual dispondrá de las brigadas blindadas y mecanizadas que miran hacia el sur del país.

En misma linea, se restituye el comando de la Brigada Mecanizada X a la ciudad de Santa Rosa, donde también se constituirá una Gran Unidad de Batalla. Este comando tomará eventualmente las funciones de lo que fue la II División del Ejército Argentino ubicada en Córdoba.

Si bien desde un principio de gestión se estableció que se volvería atrás con la idea de reconversión propuesta en la gestión anterior, para restituir el posicionamiento y la ocupación geográfica, el parte del Ejército solo avanza con la implementación de 3 grandes unidades (divisiones) frente a las 4 que originalmente existían antes de la propuesta buscada por la gestión Aguad. Sobre esto, se prevé completar la misma organización completado el ciclo de planeamiento.

Una reconversión que no prosperó

La nueva disposición organizativa del Ejército Argentino tiene sus orígenes con la asunción de Agustin Rossi al Ministerio de Defensa. A poco de ubicarse en su despacho en el Edificio Libertador, impulso la Resolución Nº 1562/19, que tiró hacia atrás lo estado por el ex ministro Oscar Aguad en cuanto a su propuesta de “reconversión”.

El objetivo de este plan surgido durante la pasada gestión en la cartera apuntalaba una simplificación administrativa y funcional de las unidades de la fuerza, buscando achicar las posiciones de comando y liberar de esta forma personal y medios para completar unidades con enormes déficit.

Funcionarios de la actual gestión le endilgaban al caído proyecto la intención de minimizar directamente la proyección territorial de la fuerza, motivo por el cual terminaron dando marcha atrás con el plan conforme a “reestablecer las estructuras orgánico-funcionales según lo dispuesto por la Ley de Defensa Nacional”.

Con este avance en materia de reposicionamiento de comandos, el plan de Aguad termina por ser complemente descartado.

Poco material y poco recurso humano

Si bien el proyecto de redespliegue se encuentra en curso, se estima que la completa materialización del mismo provendrá de los resultados del Ciclo de Planeamiento de Defensa Nacional apenas resuelta una nueva Directiva Política de Defensa Nacional.

Sin embargo, en el seno de las tres fuerzas armadas ya se trabaja en una pre planificación y reunión de información, proyectos y planes que sirvan como insumo apenas se avance con los procesos de planeamiento, que contempla una dinámica en cada una de las fuerzas, en el Estado Mayor Conjunto y posteriormente en el Ministerio de Defensa.

La intención propuesta con el redespliegue es mantener las grandes unidades de batalla (o divisiones) con el objetivo de cumplimentar la vocación de territorialidad de las Fuerzas Armadas. La problemática que existe en la actualidad, y que vale recordar que se remonta a décadas atrás, es que las distintas brigadas y sus unidades dependientes, se encuentran en una critica situación en materia de recursos materiales y humanos.

Existen en la actualidad unidades que operan con menos de la mitad del personal y con el agravante de no poseer equipamiento. Esto impacta de manera importante en la intención de mantener la idea de las Grandes Unidades de Batalla, que insumen personal de comando, recursos materiales y otros insumos que serian muy necesarios en las unidades tácticas.

A su vez, no hay un panorama claro si la restitución de las divisiones acarreará una política solida en cuanto a incorporación de personal y material en el corto-mediano plazo, o si, por el contrario, se continuará manteniendo una orgánica funcional con “ravioles” que no se encuentran plenamente operativos.

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8 COMENTARIOS

  1. Sin un plan de reequipamiento, incremento de personal y modernización de infraestructuras esto es solamente trasladar despojos de un lugar a otro.

  2. Tenemos que tener por lo menos 30.000 soldados más y ni hablar reequipar a la fuerza ejercito, marina y fuerza aerea. Inclusive hay que crear nuevas guarniciones a lo largo de la frontera con Chile, dotar de capacidad disuasiva a toda la costa patagónica con misiles tierra aire de mediano y si es posible largo alcance y por supuesto escuadrillas de cazas, para prevenir cualquier intento de copar la Patagonia. Crear grupos tacticos especialmente comandos anfibios bien entrenados y pertrechados a todo lo largo de la costa desde Tierra del Fuego a Bahía Blanca capaces de actuar rápidamente. Sólo así podremos evitar lo que hace tiempo quieren que es adueñarse de la Patagonia.

  3. Un comentario. Si esto se filtró a un medio civil, me genera cierta inquietud. No quiero saber lo que pueden llegar a averiguar los servicios extranjeros, el talle de ropa interior del jefe de Estado Mayor. Si bien esto es algo que, seguramente, se sabrá públicamente en poco tiempo, el que se filtre fuera de los comandos, es preocupante.

  4. Por otra parte, no creo que sea buena idea cambiar la ubicación de la Fuerza de Despliegue Rápido (FDR), debe quedar en Córdoba, ya que está en el centro geográfico del país. En Buenos Aires, se alejaría de ciertos puntos del país, siendo la característica de esta fuerza poder moverse rápidamente a cualquier punto del país donde se necesite, agudizada esta situación por la falta de la cantidad adecuada de medios para movilizar gran cantidad de tropas en poco tiempo. No me queda claro cuál sería la función del Comando Conjunto Subordinado Norte en Curuzú Cuatiá. Seguramente el el Comando de la División del Ejército 1 lo llevarán a Rosario. Lo bueno es que las FFAA hagan ocupación territorial del nuestro país, aún cuando sus medios humanos y materiales no estén completos.

  5. Inocencio. Con los politicos que tenemos desde hace años y los amagues anticipados, no necesitan de mucha Inteligencia para adelantarse y frustrarnos. Es aí aca la inteligencia se usa para espiar a nuestros politicos de parte de nuestros politicos o a los ciudadanos. Ojala las Fuerzas tengan los elemento necesarios para defender minimamente la soberanía. Y sino a dejar de comer pescado por ejemplo. Saludos

  6. la realidad es que RU con 4 Eurofighter en Malvinas tiene el mayor potencial aéreo en el Cono Sur sin contar con el despliegue potencial de buques de la Navy y aviones de la RAF … un país enorme con una plataforma marítima aún más grande y derechos sobre la Antártida se encuentra totalmente indefenso, sin fuerza aérea ni armada poco se puede hacer contra una armada extranjera que empezara a ocupar zona marítima o territorios australes, la solución es “exigir” a USA cazas F16 y F18 de sus enormes depósitos en la reserva (que pueden entregar a coste 0, de hecho lo siguen haciendo con países aliados o de su área de influencia) a pesar del veto inglés, en otro caso, plantear la compra de material ruso o chino acompañado de la “visita” de barcos chino-rusos a puertos australes, los americanos no tardarán mucho en reaccionar, no van a entregar F35 pero seguro que aceptarían F16, no de última generación pero seguirían siendo reactores operativos, es cuestión de apostar fuerte, no hay nada que perder

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