Varios aviones cisterna KC-135, desplegados en la Base de la Fuerza Aérea de Andersen, fueron dañados esta semana cuando el huracán María pasó por Guam. La noticia fue confirmada por la Fuerza Aérea del Pacífico.
La teniente coronel, Megan Schafer, vocera de Pacific Air Forces, dijo que una pequeña cantidad de aviones sufrieron daños durante el huracán María, donde la evaluación de los daños está aún en curso.
Schafer se negó a comentar cuántos buques cisterna fueron dañados por la tormenta o cuántos se encuentran desplegados actualmente en Andersen. La portavoz de PACAF también se negó a comentar sobre el alcance del daño sufrido por la aeronave.
“Hay piezas disponibles, y se prevé que los aviones afectados regresarán a la flota en el futuro cercano”, dijo. “Si bien no entraremos en detalles operativos, las aeronaves existentes continúan asegurando que se cumplan las necesidades de la misión”.
El huracán María comenzó como una tormenta tropical con vientos máximos de aproximadamente 70 millas por hora cuando golpeó a Guam el miércoles y el jueves. El viernes, se actualizó a un “súper huracán”, y Wind Weather ha informado de una velocidad de 160 kilómetros.
La Revista de la Fuerza Aérea en junio reportó que actualmente hay seis KC-135 con sede en Andersen, incluyendo uno de la Guardia Nacional Aérea de New Hampshire y Nebraska, dos de la Guardia Nacional Aérea de Alabama, un avión de MacDill AFB, Florida, y uno de Tinker AFB, Okla.
Los buques cisterna cumplen la función de apoyar la presencia continua de los cazas estacionados en Guam.
