La Fuerza Aérea informa que se desarrolló en la Escuela de Aviación Militar (provincia de Córdoba), el acto correspondiente al 105º aniversario de su creación, ocurrida el 10 de agosto de 1912.

Encabezó la ceremonia el Ministro de Defensa,  Dr. Oscar Aguad, junto al Jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea, Brigadier General (VGM) Enrique Víctor Amrein, acompañados por altas autoridades nacionales, militares e invitados especiales.

La jornada dio comienzo con la revista de efectivos formados y con la entonación de las estrofas del Himno Nacional Argentino. A posteriori se hizo entrega de la distinción “Amigos de la Fuerza Aérea”.

Seguidamente, se ejecutó Diana de Gloria, se realizó una invocación religiosa y a continuación, un emotivo toque de silencio junto al pasaje aéreo correspondiente.

Posteriormente, llegaron las palabras alusivas a cargo de las autoridades presentes, luego de lo cual, se dio comienzo al desfile terrestre de todas las unidades de la Fuerza Aérea Argentina, habiéndose suspendido el pasaje de otras aeronaves por las condiciones meteorológicas imperantes.

En un tramo de su alocución, el Jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea aseguró: “Ésta plataforma y éstos hangares de la escuela, como los de Palomar hace 105 años y los de todas las unidades de la Fuerza Aérea, nos recuerdan la esencia de nuestra vocación y el propósito de vestir el uniforme de la institución: el vuelo”.

“Por eso hoy y aquí, reafirmamos en este nuevo aniversario nuestro compromiso como hombres y mujeres del aire: la defensa de la patria desde el cielo y del espacio, como lo hicimos ayer, hoy y siempre”.

Asimismo, destacó que: “éste día de celebración debe ser un momento de reconocimiento para todos quienes con visión, esfuerzo,  compromiso y coraje, aún con los errores y deficiencias propias del ser humano, ayudaron a construir nuestra fuerza y a engrandecer al país”.

 

“Rindamos nuestro homenaje a quienes han ofrendado su vida en el cumplimiento del deber, desde nuestros primeros mártires, a quienes dejaron su vida de manera silenciosa en su desempeño diario y en especial, a nuestros héroes de Malvinas, oficiales, suboficiales y soldados, que demostraron que supieron morir porque sabían el porqué vivir”.

Para finalizar, remarcó: “De cara al futuro, la fuerza aérea se encuentra frente a nuevos retos y estamos decididos a enfrentarlos con el mismo valor que lo hicieron nuestros precursores hace más de 100 años”.

“Somos conscientes que vamos a tener nuevos obstáculos que sortear y nuevas barreras que superar, pero también vamos a estar preparados para aprovechar esas oportunidades que seguramente  van a llegar”.

 Historia de la Aviación Militar Argentina

En el año del Bicentenario de nuestra Independencia, la Fuerza Aérea Argentina conmemora el 10 de agosto, un nuevo aniversario de su creación. En 1912, el entonces Presidente de la Nación, Roque Sáenz Peña, firmó el decreto de creación de la Escuela de Aviación Militar, en terrenos de El Palomar, Provincia de Buenos Aires. Este centro formador de los aviadores militares argentinos, luego sería trasladado en 1937 a la Ciudad de Córdoba, su actual asiento.

La visión de nuestros precursores permitió asociar la incipiente  actividad de vuelo a la defensa de nuestra soberanía, y a través de la progresiva  capacidad  que el poder aéreo adquiría, contribuir  desde esa primera unidad aérea militar creada en nuestro país, a la concreción de la defensa y de los más altos intereses de la nación.

La primera meta fue el Río de la Plata. Cattaneo ya lo había cruzado en 1910, pero solo de ida ya que regresó en barco. Fue Jorge Newbery quien el 24 de noviembre de 1912, con intención de ir a la estancia de su amigo Aarón de Anchorena, en la Barra de San Juan, Colonia; lo cruzó en un Bleriot XI de su propiedad, de ida y vuelta a El Palomar en el mismo día.

Pero su hazaña fue superada unos pocos días después por el conscripto Pablo Teodoro Fels, quien a bordo de su Bleriot, idéntico al de Newbery lo cruzó en la madrugada del 1º de diciembre de 1912 con rumbo a Montevideo, donde llegó dos horas después, batiendo el record mundial en el vuelo sobre agua. Por esta hazaña, Fels fue felicitado, homenajeado y ¡sancionado! por el ejército por haber contravenido las reglamentaciones militares. Tras cumplir su arresto, fue ascendido a Cabo.

Jorge Newbery, entre tanto, seguía su intensa labor batiendo récords y sumando experiencia con intenciones de realizar su gran sueño, el cruce aéreo de la Cordillera de los Andes. En estos preparativos, batió el record mundial de altura, al elevarse 6.225 metros sobre El Palomar.

La década del veinte estuvo jalonada de grandes raids y récords, en los que la aviación argentina se destacó entre las primeras del mundo. Es así que en el año 1924 el Mayor Pedro Zanni inició su famoso raid alrededor del mundo, cubriendo en diversas etapas el cruce sobre Europa y Asia hasta Japón.

En 1927, ante la importancia adquirida por la Aviación Militar, un decreto del Poder Ejecutivo creaba la Dirección General de Aeronáutica con la categoría de Gran Repartición. Ese mismo año se crea en Córdoba la Fábrica militar de Aviones, ya que si bien se fabricaban aviones desde los inicios de la aviación en nuestro país, tales como los Castaibert o los Mira y desde 1916 existía un taller en la escuela que no sólo reparaba sino que llegó a construir máquinas, la fabricación no estaba racionalizada ni regulada.

El 11 de febrero de 1944 se da el primer paso para el nacimiento de la más moderna de las Fuerzas Armadas, se crea el Comando en Jefe de Aeronáutica, en uno de los considerandos del decreto se hacía mención a la creación de la Secretaría de Aeronáutica en un futuro cercano.

 

Es así que el 4 de enero de 1945 la Fuerza Aérea Argentina nace como fuerza armada independiente, al crearse la citada Secretaría. A partir de esta fecha la nueva Fuerza asume en pié de igualdad con el Ejército y la Marina de Guerra, la alta misión que significa la custodia y defensa de la Soberanía Nacional.

En el año 1947 nuestro país realiza sus primeras actividades en la investigación espacial y es la Fuerza Aérea quien a través de la Comisión Nacional de investigaciones Espaciales (CNIE), lleva a cabo lanzamientos de toda una familia de cohetes los GAMMA CENTAURO, BETA CENTAURO, ORION y otros.

En 1952 la Fuerza Aérea da comienzo a su presencia en la Antártida cuando un avión Avro Lincoln, al mando del Vicecomodoro Gustavo A. Marambio, realiza un lanzamiento de elementos de supervivencia sobre la base General San Martín del Ejército Argentino.

En a fines del año 1965 una Escuadrilla Aérea al mando del Vicecomodoro Mario Luis Olezza, integrada por el avión Douglas C-47, matrícula TA-05 y los pequeños aviones DHC-2 matrículas P-05 y P-06, volaron desde la Base Aérea Teniente Matienzo hasta la Base Belgrano de la Antártida Argentina y de allí al Polo Sur Geográfico (latitud 90º S), continuando solo el C-47 TA-05 su vuelo transantártico con rumbo norte, hasta la Estación McMurdo de los Estados Unidos, ubicada del lado opuesto al Sector Antártico Argentino, a las orillas del mar de Ross, donde anevizó después de cinco horas y media de vuelo, completando de esta forma el primer vuelo Transpolar Transcontinental por parte de un avión argentino.

En 1969 la Fuerza Aérea Argentina realizó una epopeya de trascendencia Nacional, Histórica y Geopolítica, cuando los integrantes la Patrulla Soberanía, viviendo en pequeñas carpas, en una zona extremadamente inhóspita, contando solo con picos, palas y trabajando con esfuerzo, garra y coraje, abrieron un surco de tierra en el Desierto Blanco para permitir operar aviones de gran porte con tren de aterrizaje convencional, es decir con ruedas; lo que culminó con la fundación de la Base Marambio el día 29 de octubre de 1969, que la convirtió en la puerta de entradas de la Antártida y con esta capacidad operativa, romper el aislamiento con el Continente Antártico.

El 4 de diciembre de 1973 se realiza el primer vuelo transpolar bicontinental, uniendo el continente americano con Oceanía.

El 27 de octubre de 1977, un helicóptero Lama Sa-315, al mando del Teniente Héctor Pereyra aterriza en tres oportunidades en la cumbre del cerro Aconcagua.

El 2 de abril de 1982 la Fuerza Aérea da inicio a las operaciones relacionadas con la gesta de Malvinas. Recibe su Bautismo de Fuego el día 1º de mayo y desde entonces hasta el fin de  las  hostilidades,  el 14 de junio,  realiza  operaciones  que causaron la admiración del mundo por su audacia y las condiciones adversas a las que debió sobreponerse.

Con el advenimiento del nuevo milenio, la Fuerza Aérea se encuentra abocada no solo a sus actividades estrictamente militares. Colabora en los servicios de búsqueda y salvamento; efectúa investigaciones científicas y responde a exigencias y necesidades de la comunidad ante catástrofes naturales, realizando el traslado de ayuda humanitaria por medios aéreos que permitan responder con celeridad y eficacia ante estas situaciones.

 

Como parte de las operaciones que la Fuerza Aérea desarrolla, durante el corriente año implementó una serie de actividades que por su importancia han cobrado relevancia. Una de ellas es la relacionada con la ayuda humanitaria a la comunidad ante los diversos desastres naturales que afectaron diferentes puntos del país. Por lo que se llevo a cabo un operativo de asistencia a Comodoro Rivadavia, debido a las fuertes inundaciones que sufrió la provincia.

Asimismo, concluyó con éxito la Campaña Antártica de Verano 2016/17 en las Bases Marambio y Matienzo, asegurando la continuidad de las actividades que se desarrollan a lo largo del año en el Sector Antártico Argentino.

Respecto de la capacitación obtenida en los diferentes ejercicios “Cooperación”, cuyo objetivo es el de adiestrar en materia de ayuda humanitaria, se aplicó y se puso en práctica en ocasión del alud sufrido por la República del Perú por lo que solicitó el apoyo de los miembros del Sistema de Cooperación de las Fuerzas Aéreas Americanas (SICOFAA). El Escuadrón Hércules de la I Brigada Aérea de El Palomar envió una aeronave C-130 y su tripulación, que brindó asistencia y cooperación ante dicha problemática en el país vecino.

Otro importante ejercicio fue el “Larus II 17”, realizado en la Base Aeronaval Comandante Espora de la Armada Argentina (Bahía Blanca), que implicó un significativo despliegue de personal y material. Se desarrollaron operaciones conjuntas entre las Fuerzas Armadas a fin de adiestrar y evaluar al personal en tareas de defensa contra aérea, apoyo de fuego cercano, abastecimiento aéreo y procedimientos de interceptación en combate.

Por otra parte, en la VI Brigada Aérea de la ciudad de Tandil, también se desarrolló el ejercicio “Cobra”, mediante el cual se adiestró a las tripulaciones en tareas de abastecimiento aéreo de personal y carga, búsqueda y salvamento, exploración y reconocimiento aéreo, salto manual y automático de paracaidistas y despliegue y emplazamiento del sistema defensivo antiaéreo.

Respecto al Operativo Fronteras, desarrollado en el norte de nuestro país, la Institución continúa su labor dentro de las Fuerzas de Tareas Conjuntas con la finalidad de incrementar la vigilancia y el control del espacio aéreo en esa zona e identificar vectores hostiles que puedan poner en peligro a los intereses vitales de la Nación.

Asimismo, desde la década del sesenta, la participación de la Fuerza Aérea Argentina en Misiones de Paz se mantiene en pie, destacándose la participación en Chipre, con el aporte de un Bell-212 y dos Hugues 500, únicos helicópteros que utiliza la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en esa Isla del Mediterráneo. Es destacable, además que, desde el 2004, nuestra Institución brinda apoyo a la República de Haití, donde se encuentra desplegado el Hospital Reubicable que junto al personal de médicos, enfermeros y técnicos se han ganado el reconocimiento de la ONU.

Resultó trascendental para la Fuerza Aérea Argentina la presentación del primer avión de transporte Hércules C-130 modernizado en el país, en la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA), como parte de un programa de actualización de este sistema de aeronaves de transporte y carga de la Fuerza Aérea. Este avance permite incrementar la capacidad operacional, mejorar la confiabilidad y la seguridad y, simultáneamente, disponer de una configuración común que permita cumplir con los últimos requerimientos internacionales en términos de comunicación, navegación, vigilancia y gerenciamiento de tráfico aéreo global.

A 105 años de sus inicios, la Fuerza Aérea Argentina es parte indivisible de la sociedad y, fiel a su misión, mantiene y renueva su compromiso con la Patria, custodiando y protegiendo el espacio aéreo para “Mirar al cielo y saber que están ahí…”

 

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5 COMENTARIOS

  1. Se necesitarian aviones y helicopteros de todo tipo, pero sobre todo Aviones Cazas de 4ta o 4++ generacion preferentemente rusos

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