El EA-18G Growler llega a Avalon el 1/3/ 2017 al Australian International Airshow. Foto: CPL Ben Dempster

Traducido y adaptado por Negro2000

La ministra de defensa, la senadora Marise Payne, dio hoy la bienvenida al primer avión de ataque electrónico EA-18G Growler a la Royal Australian Air Force.

Volando al Australian Airshow Internacional en Avalon desde la Estación Aérea Naval de Whidbey Island en los Estados Unidos, los Growlers son una potente y tecnológicamente avanzada nueva capacidad para la Fuerza Australiana de Defensa.

La ministra Payne dijo que el Growler era un verdadero multiplicador de la fuerza.
“El Growler puede interrumpir los sistemas electrónicos militares, como sus radares, para proteger al personal y mejorar la conciencia situacional”, dijo la ministra Payne.

“Australia es el único país fuera de los Estados Unidos que vuela el EA-18G Growler y su llegada es un salto significativo hacia adelante en la capacidad de guerra electrónica conjunta de Australia y presenta una opción de ataque electrónico dedicado”, dijo la ministra Payne.

La ministra Payne también anunció hoy que Australia se asociará con los Estados Unidos para desarrollar una próxima generación de radar y radiofrecuencia para el Growler.

“Esta es una inversión de 250 millones de dólares del gobierno de Turnbull que será la prueba futura de la capacidad del Growler”, dijo Payne.
“Como se trata de un área en rápida evolución, trabajaremos en colaboración con la Armada de los Estados Unidos para desarrollar la capacidad de interferencia de próxima generación, lo que garantizará que estos aviones se mantengan a la vanguardia tecnológica a lo largo de su vida útil”.

El Jefe de la Fuerza Aérea, el Mariscal del Aire Leo Davies, dijo que el Growler es una parte vital de la evolución de la Fuerza Aérea a una futura Fuerza Aérea de quinta generación.
“El Growler de EA-18G funcionará como parte de nuestra fuerza en red e integrada, capaz de compartir datos de inteligencia electrónica, vigilancia y reconocimiento con otras aeronaves, así como con el Ejército y la Marina.

“El Growler es poderoso y flexible. Puede llevar a cabo una serie de tareas no cinéticas, que van desde la interferencia hasta el bloqueo de las pantallas de radar y la supresión del sistema de defensa aérea de un adversario “, dijo el mariscal Davies.
Australia ha comprado 12 EA-18G Growlers, que serán entregados a la RAAF en la Base Amberley en Queensland a mediados de 2017.

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