Por Tyler Rogoway
Compilación y traducción por Grulla

Durante años, todo el mundo en el negocio de la aviación sabía que los proyectos secretos stealth de Boeing desde la década de 1960 se limitaban a un solo nombre y una misteriosa foto. Parecía una reliquia fuera de tiempo, poseyendo muchas características de diseño furtivos que no existirían hasta décadas más tarde, y aún así, sólo en proyectos negros altamente clasificados.

Pero Boeing proveyó exclusivamente y por primera vez a Foxtrot Alfa con un tesoro de fotos e información. Después de décadas en las sombras, aquí esta el Boeing “Quiet Bird”, de la era Kennedy.

Incluso Boeing admite que se conoce muy poco sobre el Quiet Bird, también llamado Modelo 853, y que los registros oficiales del programa probablemente fueron destruidos en 1970. Sin embargo, los fragmentos de información que existen sobre este concepto pintan un cuadro muy interesante de un avión con elementos de diseño que se han hecho eco a lo largo de las décadas que le siguieron.

El concepto se remonta a la década de 1960, con un modelo a escala de la mitad de la aeronave y el modelo siendo construido en algún momento entre 1962 y 1963. El avión era un ejercicio de la utilización de materiales y formas específicas para reducir drásticamente la sección transversal radar de un avión táctico .

A partir de este diseño pionero, se otorgaron a Boeing cinco patentes “stealth”, que sólo parecen haber aparecido en los registros públicos en la década de 1990, décadas después de que se presentaron oficialmente.

Se dice que el modelo del Quiet Bird ha sido probado en las instalaciones de Wichita de Boeing desde 1962 hasta 1963, todo lo cual ocurrió en el alcance del radar. Sin embargo no se llevaron a cabo ensayos en vuelo reales del Quiet Bird. Las pruebas en tierra fueron de gran éxito: se demostró que era posible disminuir drásticamente la firma radar de un avión táctico.

A pesar de esto, el concepto no sólo estaba diseñado como una forma para probar la reflectividad radar. Boeing tenía planes completos para desarrollarlo en un avión real. Desafortunadamente para ellos, el diseño terminó siendo demasiado adelantado a su tiempo. Incluso para ser adaptado como aeronave de observación adelantada o ataque, y, aunque no lo crean, los militares tenían poco interés en ella.

En realidad, esto tiene algún sentido. En ese momento se pensaba que las prestaciones en bruto y la aviónica cada vez más avanzada podrían permitir penetraciones todo tiempo a alto o bajo nivel del espacio aéreo enemigo (véase también el SR-71, U-2, A-6 y F-111). Así las cosas, este jet no habría sido bien interpretado, pero muy bien podría haber sido invisible a los sensores enemigos, y con eso, ¿quién necesita prestaciones?

No sería hasta cerca de una década después, cuando el Pentágono recién comenzaría a considerar los diseños de aviones con tecnología de bajo observabilidad como su conjunto de características primaria, mas tarde apodadas stealth, como la bala de plata tecnológica a la que valía la pena seguir con fervor.

Al mirar al Quiet Bird, especialmente en estas nuevas imágenes y esquemas publicados por Boeing, es increíble que una gran cantidad de características furtivas que se utilizan actualmente en los modernos diseños de aeronaves de baja observabilidad hayan existido hace 50 años en este modelo conceptual. Las aristas de la aeronave que separan a su fuselaje en formas trapezoidales y de suave curvatura superficial, son principios clave de los diseños furtivos de nuestros tiempos.

Las derivas inclinadas con la tobera del motor instalada entre ellas y adelantada respecto a su borde de fuga son también características clave que se encuentran en muchos aviones de combate modernos que fueron diseñados con el control de la firma calórica y radárica en mente. Esta configuración no sólo ayuda con la reducción de la reflectividad radar mientras que todavía proporciona estabilidad y control de maniobra, sino que también oculta el calor de los gases de escape de la aeronave desde prácticamente todos los ángulos, excepto directamente desde arriba y por detrás.

Incluso la cúpula de la cabina enchapada en oro y el uso de materiales compuestos en la estructura son las principales técnicas ampliamente en uso hoy en día para reducir la firma radar de una aeronave tripulada.

El diseño único de baja observabilidad de entrada de la toma de aire y el conducto de aire curvado del Quiet Bird tienen el propósito de proteger de las ondas de radar al altamente reflectante compresor del motor. Una disposición similar se utiliza en la mayoría de los diseños de aviones stealth hoy en día, y la configuración del Quiet Bird es muy similar a la del avión experimental no tripulado X-47A Pegasus:

En total, una cantidad impresionante de características de diseño del Quiet Bird, algunos de los cuales están por debajo de su recubrimiento y detallada en estas patentes (1,2,3),, se utilizan en diversos grados en una gran cantidad de aviones modernos diseñados con el control de la firma en mente. Estos incluyen al Tacit Blue, B-2, Have Blue/F-117, YF-23, X-32, F-22, Avenger, Global Hawk, y varios vehículos de combate aéreos no tripulados incluidos los de la Phantom Ray de Boeing.

Incluso los misiles de crucero furtivos instantáneamente evocan a la configuración del Quiet Bird. Es casi como si Boeing creó espectacularmente una Piedra Rosetta para la tecnología de furtividad antes de que fuera incluso “oficialmente” inventada.

No hay lugar donde mas se vea reflejado el espíritu del Quiet Bird que en el una vez altamente secreto demostrador tecnológico Bird Of Prey de Boeing . A diferencia del Quiet Bird, el Bird Of Prey llegó a volar en la década de 1990.

Incluso aunque ambas aeronaves están separadas por tres décadas y media, el Bird of Prey fue una especie de nueva versión del Quiet Bird, aunando un montón de técnicas de fabricación avanzadas y de experimentación de baja firma radar, junto con bajas prestaciones para asentar la innovación en bruto. Ambas aeronaves son incluso similares en diseño.

Esta célula allanó el camino para muchas tecnologías que permitieron a Boeing entrar en el siglo 21 listo para competir en el mercado de la avanzada militar aeroespacial. Esto incluia el rápido, grandes estructuras de materiales compuestos de una sola pieza, diseño 3D, herramientas desechables y una serie de innovaciones en baja observabilidad.

El exótico demostrador tecnológico Boeing Bird Of Prey:

Boeing no niega el impacto indirecto del Quiet Bird en muchos de sus productos que le siguieron a lo largo de los últimos cinco decenios, y escribe:

El modelo y los dibujos muestran algunos conceptos de furtividad que se utilizan en la operación de aviones stealth hoy en día, por lo que parece que los ingenieros de Boeing que trabajaron en este proyecto estaban sobre algo. Las lecciones aprendidas con el Quiet Bird Quiet probablemente hayan influido en el diseño del misil de crucero de lanzamiento aéreo Boeing AGM-86.

Internamente Boeing continuó trabajando en las estructuras no metálicas que fueron pioneras con el Quiet Bird y esos trabajos eventualmente llevaron a la utilización de estructuras de materiales compuestos cada vez más grandes y complejas en los aviones Boeing. En la década de 1980 Boeing utilizo su experiencia en estructuras de materiales compuestos (“Stealth”) para construir las estructuras de alas y fuselaje central del bombardero B-2, y en la actualidad las principales estructuras de nuestros aviones comerciales se pueden construir a partir de estructuras de materiales compuestos, por ejemplo en el 787, el primer avión comercial que está hecho principalmente de materiales compuestos.

Aunque el Quiet Bird permanece en el misterio, incluso para la empresa que lo construyó, potencialmente cambia la forma en que comúnmente observamos la llegada de la tecnología stealth. Este diseño era un concepto muy bien pensado que era anterior a las iniciativas de furtividad del Pentágono de mediados de la década de 1970, incluido el programa XST, que nos dio el demostrador Have Blue y el F-117 Nighthawk, las primeras aeronaves stealth (conocidas) operativas de América.

Otros aviones que surgieron de este período de tiempo, incluida la aeronave demostradora experimental de vigilancia del campo de batalla Tacit Blue y potencialmente toda una franja de aviones que permanecen altamente clasificados.

Vídeos del demostrador de tecnología furtiva Lockheed Have Blue y del F-117 Nighthawk:

Aunque otras aeronaves, como los Lockheed A-12 Oxcart/SR-71 Blackbird, tenían características de sigilo secundarias, el Quiet Bird parece ser el primer concepto que contaba con un diseño integral de baja observabilidad. Así, mientras que Lockheed se mantuvo en gran medida a la luz pública como el precursor de la “revolución de la furtividad,” Boeing milagrosamente estuvo allí con un concepto de aeronave extrañamente avanzada casi una década y media antes de que los Skunk Works Lockheed desarrollasen su ahora famoso “hopeless diamond” que llevó al histórico demostrador tecnológico Have Blue.

Con todo esto en mente, el Quiet Bird merece el lugar que le corresponde en la historia, aunque sólo sea como una predicción asombrosamente exacta de lo que estaba por venir décadas después en el mundo de la tecnología militar y el diseño aeroespacial “bleeding-edge”.

Póngase en contacto con el autor en [email protected].

Un agradecimiento especial a los departamentos de archivos pendientes y de derecho de autor de Boeing.

Todas las fotos y dibujos de Quiet Bird tienen copyright de Boeing – Créditos: The Boeing Company.

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